La reciente alianza entre Agile Alliance y el Project Management Institute (PMI) está generando un gran interés en la comunidad profesional (Agile Alliance anuncia su alianza con PMI). Por ello, quiero mantenerte informado sobre esta noticia y compartir mi perspectiva como Johana Chuquino, así como la de Agile Wise, acerca de lo que podría suceder a futuro.
Fuente: Agile Alliance. (2024). Imagen de la alianza entre Agile Alliance y PMI. Recuperado de https://www.agilealliance.org/agile-alliance-joins-project-management-institute-pmi/.
Sobre esta colaboración, se han discutido diversos aspectos, pero me centraré en dos puntos claves que considero deben ser los que nos importan como profesionales:
- ¿Qué motivos subyacen a esta fusión? ¿Cuál es su trasfondo?
- ¿Qué debe importarnos?
1. «Motivos» detrás de la alianza: una evolución necesaria
– Enfoque holístico
En primer lugar, esta unión podría presentar algunos «beneficios» para los profesionales certificados en alguna de estas instituciones, al menos beneficios a nivel de prestigio y reskilling/upskilling. No se trata únicamente de un enfoque en un marco de agilidad o de gestión, sino de una ampliación de perspectivas de ambos lados. Desde la visión de la agilidad, ahora se podría integrar una perspectiva más holística de la gestión integral que ha caracterizado al PMI. Esto incluye dos puntos claves y de dolor para muchos productos de larga vida: la gestión de costos y la de riesgos, facilitando el abordaje de manera estructurada.
– Agilidad como commodity
Por otra parte, esta alianza responde a las tendencias del mercado. Las organizaciones demandan cada vez más profesionales con competencias ágiles en todos los niveles, dado que la agilidad se ha convertido en un commodity. En consecuencia, las empresas ya no se enfocan únicamente en contratar facilitadores ágiles (no hablo de los buenos Scrum Master con capacidad de gestión y visión del futuro, sino de profesionales cuyo único valor era facilitar ceremonias de Scrum o alguna práctica ágil), lo que ha generado impactos en el mercado laboral.
En Latinoamérica, por ejemplo, se observa una clara reducción de presupuestos destinados a roles como Scrum Masters o Agile Coaches. En Chile empezó una salida de estos perfiles al 2022, en Perú desde 2023, se ha evidenciado una disminución significativa tanto en la demanda de estos roles como en las remuneraciones asociadas. Anteriormente, los salarios de un Scrum Master oscilaban entre $2,200 y $3,000 dólares, mientras que un Agile Coach podía alcanzar entre $3,500 y $5,000 dólares. Sin embargo, en la actualidad, estos roles perciben salarios considerablemente menores: un Scrum Master senior (+3 años de experiencia) está entre $1,500 y $2,200 dólares, mientras que un Agile Coach experimentado aproximadamente los $3,000 dólares (para nuevos contratos).
La evolución de los productos (madurez y predictibilidad) hacen que las organizaciones busquen profesionales que integren el mindset agile en su día a día, que además posean habilidades complementarias para manejar proyectos altamente cambiantes y complejos, mientras que tengan la capacidad de gestionar de los riesgos, el presupuesto, los costos y liderar personas, aspectos especialmente críticos en un contexto donde la tercerización del desarrollo de software es cada vez más frecuente.
– ¿Nuevas certificaciones?
Las certificaciones ágiles promovidas por el PMI no lograron el impacto esperado aún con la compra de Disciplined Agile en el 2019, debido a la percepción que se tiene de esta institución: tradicional y burocrática. Por su parte, Agile Alliance, aunque mantiene un enfoque ágil, ha enfrentado desafíos relacionados con un exceso de enfoque en certificaciones (para mi gusto demás e innecesarios en vez de basarse en la evolución del rol) y una pérdida de flexibilidad organizacional.
En este contexto, la alianza busca unir fuerzas para adaptarse a un mercado que exige profesionales con capacidades integrales y holísticas en cualquier rol. Más que competir, ambas instituciones buscarían desarrollar una oferta conjunta que responda a las necesidades actuales. Es probable que, como resultado de esta colaboración, surjan nuevas certificaciones que combinen «lo mejor y lo peor de ambos mundos». Lo raro de esto es que nadie lo pidió.
2. ¿Qué debería importarnos de la alianza?
Como primera respuesta diaria que NADA. Desde el año pasado veíamos que el PMI ya participaba como auspiciador de eventos ágiles de la Agile Alliance, esto no es nuevo, pero, más allá no trae nada nuevo de valor necesario para la transformación que estamos viviendo: la IA.
¿Qué opinas tú al respecto?
